Las Socho
Jorge Churio
Las Socho narra la génesis de una escritura diferente, de una escritura teselada en la que cada trocito de cerámica suma al mosaico una nueva capa de sentido. Es un texto que se escribe a sí mismo, se lee a sí mismo desde la conciencia de un yo absolutamente lírico, soñador, entrañable como un viejo amigo.
Su prosa se repliega y desde el borde de un cuento surge la poesía -propia y ajena- sorprendiendo por la fuerza inusitada de las palabras. Cada uno de los seis relatos y los cuatro precedidos por el título del libro pueden abordarse de un modo aleatorio, como los capítulos de la Rayuela cortazariana, pero si seguimos el orden que propone el escritor, la perspectiva cambia: son cuentos, aunque son también una biografía centrada en los juegos de la memoria.
El universo creado por Jorge Churio, el de los ejecutivos que viajan por el mundo y no les importa tanto preparar la reunión con los clientes, como observar la magia de las ciudades, la belleza de esos seres que se cruzan una vez por su camino y dejan huellas imborrables; un universo donde se autorrefiere el acto de escribir y las palabras propias -a veces dictadas por el sueño- conviven con escenas cinematográficas, con versos de Borges, con la tristeza infinita de Osvaldo Soriano. Es un libro de nostalgias y de situaciones llenas de ternura, de humor, de fina ironía que desde su transposición a la palabra escrita, regala al lector el goce de una belleza poco frecuente.