Los libros electrónicos triunfaron estas navidades en Amazon y Barnes & Noble
fuente: lainformacion.com
Para la primera ya no es gran novedad, pero a la segunda le han supuesto la mejor campaña navideña en diez años.
Prácticamente desde la salida al mercado del Kindle, el lector de libros electrónicos de Amazon, este se ha aupado a las primeras posiciones de las listas de ventas de la cada vez más incorrectamente llamada librería.
Esta tendencia no solo se ha visto consolidada con el lanzamiento del más reciente modelo, el Kindle 3 de 6 pulgadas con pantalla de tinta electrónica pearl, que sin que Amazon haya publicado cifras de ventas, algo que nunca ha hecho en lo que se refiere a los Kindle, sí se ha convertido, al menos según la información que han dado, en el objeto con más éxito de ventas de la historia de la empresa.
De hecho, el éxito parece haberlos pillado un poco de sorpresa, pues hace meses que los plazos de entrega de los nuevos pedidos se miden en semanas sino directamente en meses, aunque siendo mal pensado también se podría pensar en que Amazon produjo pocos a propósito para dar esta imagen de éxito.
Pero en cualquier caso el éxito de Amazon con el Kindle va más allá de las ventas del aparato en si y está en haber sabido crear una plataforma que permite leer libros en este formato no solo en lo lectores que vende sino también en ordenadores con Mac OS X o Windows, dispositivos de la familia del iPhone y el iPad, en dispositivos BlackBerry, Android, y desde hace unos días también en Windows Phone 7.
Barnes & Noble, por su parte, en un éxito que sus responsables atribuyen sin dudar al Nook, su lector de libros electrónicos que también han tenido la vista de convertir en un formato compatible con múltiples dispositivos, ha conseguido aumentar las ventas en su sitio web en un 78 por ciento en estas segundas navidades que ha estado en venta, superados los problemas de escasez de dispositivos que tuvieron para las navidades de 2009.
El hecho de que B&N venda también el Nook en sus tiendas físicas les ha permitido además aumentar las ventas en un 10 por ciento como beneficio añadido.
Mientras tanto, Borders, otra de las grandes cadenas de librerías de los Estados Unidos, que no supo o no quiso apostar por la venta de libros electrónicos, está al borde de la quiebra.
